Tengo 40 años ¿Soy mayor para hacer Karate-do?…
Respuesta corta no, respuesta larga depende.
¿Puedo hacer Karate-do sin saber nada?…
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Alumnos de Dojo Kaisho
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Estas, junto a otras, son las preguntas que hacen los adultos interesados en practicar Karate-do en Dojo Kaisho.
Hacer Karate-do (el camino de la mano vacía) es uno de los mejores medios para reinventarse, sobre todo pasado los 40, la clave del éxito en nuestra escuela a sido en adaptarnos a nuestro alumnado, dándole opciones para que pueda ser constante, se mantenga motivado y decidido con sus objetivos en cuerpo, mente y espíritu.
El Karate-do moderno del estilo Shotokai reúne en una sola actividad, grandes aportaciones para las personas que disfrutan de su segunda juventud.
El Karate-do que practicamos en la escuela Dojo Kaisho hace que se potencie de manera única cuatro propiedades indispensables para esta etapa de tu vida donde tener 40 años o más no implica un lastre si no un grado más. Estas son; la movilidad, la propiocepción, la fuerza o la resistencia a la fuerza y la amplitud de movimiento, ¿quieres saber cómo?
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Alumnos de Dojo Kaisho
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1º Movilidad para restar años de vida
Si tienes 40 años o más, es común que tengas acostumbrado el cuerpo a las mismas tareas, caminarás por lugares similares, cocinarás, conducirás y trabajarás de la misma manera y con los mismos patrones de movimiento. Día tras día estos patrones serán parte de la rutina de tú cuerpo, sean saludables o no. En el caso de las personas deportistas no profesionales, es común practicar directamente desde el principio de especificidad o lo que es lo mismo, entrenar solamente bajo las condiciones concretas que exige una competición o lo que se «autoimponga» en ese momento como sesión de entrenamiento. Es muy común tener está actitud, realizando en muchos casos solo lo que se nos dá mejor hacer en el caso de los deportistas, o hacer lo justo y necesario para terminar una tarea que nos haga sentir bien.
El dilema viene tras años de acostumbrar al cuerpo a esas maneras, donde se dejará de tener adaptaciones, generando en los deportistas, estancamiento en el resultado del entreno y perdida de funcionalidad en las personas que no lo son. En cualquiera de los dos casos, frases del tipo «ya no tengo 20 años», «¡esto lo hacía yo! …pero de joven», justifican el resultado haciendo que vayas conformándote en el tiempo a esos rangos de movilidad que poco a poco se irán endureciendo.
La actividad de Karate-do Shotokai que realizamos en el Dojo Kaisho educa todos los rangos de la movilidad del cuerpo, según la articulación con trabajos individuales y grupales tanto en estático, como en la traslación y rotación del movimiento, por lo tanto, este apartado llega a ser muy saludable y educativo para las personas que superan la barrera mental de la edad que antes mencionamos, además por si no lo sabes, los iniciados a esta actividad obtendrán resultados en menor tiempo, gracias a el estimulo de fibras nuevas y los que ya estéis entrenados en otras actividades volverás a sentirte rejuvenecidos no solo en cuerpo si no también en mente y en alma.
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Ejercicio de propiocepción
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2º EL EQUILIBRIO Y LA ESTABILIDAD NO SE ENCUENTRAN, SE CREAN; PROPIOCEPCIÓN
Alrededor de los 40 años de edad aspectos como la vista o el oído van perdiendo capacidades informativas para el sistema vestibular, responsable del equilibrio y la estabilidad del cuerpo. En este caso el entreno de la propiocepción es un gran aliado para el mantenimiento y la mejora de nuestro cuerpo. Educar correctamente esta capacidad, es importante a cualquier edad, pero más aún si estamos a la mitad de nuestro camino, siempre será mejor que practicarla de manera deliberada o mantenerla en su estado base caminando o haciendo tareas cotidianas.
Pero, ¿Qué es la propiocepción?
Es fácilmente comparada con el equilibrio y la estabilidad del cuerpo, pero aunque tienen cierta relación, son diferentes. La propiocepción, es la interpretación que hace nuestro SNC (sistema nervioso central) de la posición y el movimiento del cuerpo, en función del espacio en el que se encuentra.
Sabiendo esto te estarás preguntando ¿Y para que sirve mejorar la propiocepción?
Educar adecuadamente esta propiedad, nos dá una mayor precisión de respuesta de nuestro movimiento y si la trabajamos en profundidad nos dará también anticipación siempre en función de lo que le demandemos a nuestro increíble SNC, por ejemplo entrenando con el tiempo, evitarás muchos de los traspiés que ocurren a lo largo del día, siendo los causantes de grandes accidentes, te desenvolverás con más soltura al realizar otras actividades he incluso ante un conflicto físico inesperado.
Para ello el Karate-do que realizamos en el Dojo Kaisho, educa sistemáticamente el sistema propioceptivo dada la exigencia de respuesta que necesita nuestra actividad, siendo necesaria la educación autodefensiva ante un ataque físico de un oponente. Además, tener actualizado el buen funcionamiento del sistema propioceptivo y potenciarlo beneficia en las actividades diarias y futuras en la siguiente etapa de nuestra vida.
FUERZA O RESISTENCIA A LA FUERZA
3.º motivo para comenzar Karate-do en el Dojo Kaisho pasado los 40 años de edad
La sarcopenia o disminución de la pérdida de masa y potencia muscular, entre otras perdidas más complejas, se acentúa con el transcurso de los años. El cuerpo sedentario y la edad adquieren una serie de cambios, provocando un aumento del peso graso y una disminución de la masa magra, o lo que es lo mismo, una disminución de la densidad en los órganos internos, los huesos y los músculos. En este caso, mantener un peso corporal acorde a la talla, no es del todo indicativo de salud, sino ausencia de enfermedades, dado que en este caso el tejido graso y el tejido muscular pueden transferirse de uno a otro sin variar el peso corporal, siendo más beneficioso el aumento de tejido muscular.
¿Y como puede ayudar el Karate-do que practicamos en Dojo Kaisho en el desarrollo de la fuerza? La respuesta es sencilla, el Karate-do que realizamos en la escuela Dojo Kaisho educa la fuerza a través de un entrenamiento funcional propio y consensuado, demostrándose en cuatro claves fundamentales en base a el trabajo de la velocidad de la fuerza (potencia) y de la resistencia a la fuerza.
1ª Clave
Transferencias de conductas motoras a la vida cotidiana.
Esta clave se cumple perfectamente dada la necesidad de usar todo el cuerpo como herramienta para la autodefensa bajo diferentes funciones, tales como golpeo, deslizamiento, conducción y lanzamientos entre otros. Por otra parte el trabajo sobre las diferentes partes del cuerpo, (tronco, cabeza y extremidades) de manera simétrica, proporciona un amplio repertorio de movimientos, compensando los posibles desequilibrios musculares ocasionados por el trabajo, la falta de higiene postural o la sobrecarga física como puede ser al hacer la compra, el cuidado de los hijos o la sobrecarga física de otras actividades.
2ª Clave
Funcionalidad
Esta segunda clave es nuestro primer principio técnico,- «si es efectivo es valido, si no lo es hay que seguir estudiando el cuerpo». El trabajo global que desarrolla el Karate-do que realizamos en Dojo Kaisho sobre la musculatura excluye el aislamiento muscular, tratando el cuerpo como un conjunto y no como partes individuales y desconectadas de nuestro cuerpo y por lo tanto de nuestro movimiento.
3ª Clave
Libertad de movimiento
La tercera clave se ve influenciada tras el aprendizaje de Karate-do en Dojo Kaisho que se adquiere con la dedicación constante de los años. Una vez educado el movimiento guiado desde la experiencia , el cuerpo pasa a actuar sin pensar, expresando lo que no se puede expresar con palabras, moviéndose lo que no se puede mover desde la mente controladora, en libertad de nosotros mismos, actuando y viviendo el presente en el presente.
4ª Clave
Protagonismo de la musculatura estabilizadora
La cuarta clave es un punto de estudio donde el cuerpo enseña a la mente y la mente enseña al cuerpo, tener un buen control de las diferentes partes estabilizadoras del cuerpo es necesario para la salud de nuestros sistemas corporales y la transferencia de energía que se generan durante el movimiento. Los diferentes gestos técnicos marciales que se realizan cuerpo a cuerpo hacen que esta clave se eduque de manera segura y divertida entre los practicantes.
AMPLITUD DE MOVIMIENTO
4.º motivo para comenzar Karate-do en el Dojo Kaisho pasado los 40 años de edad
Con los años al igual que otras, no es una revelación decir que esta cualidad se va mermando, donde la pregunta habitual llega a recaer en las siguientes cuestiones.
¿Ser flexible o ser elástico? ¿en que me ayuda?
La flexibilidad y la elasticidad son dos cualidades del cuerpo distintas, en la que ser flexible implica elongar una parte del cuerpo, por ejemplo, elevar el brazo por encima de la cabeza para coger un objeto que casi no alcanzamos, y ser elástico es restablecer una parte elongada como por ejemplo cuando ese objeto se cae, lo acompañamos en su caída, lo cogemos y volvemos a nuestra posición natural sin riesgo de partirnos en dos.
Se tiene el concepto de que la flexibilidad (levantar la el brazo en línea con nuestra cabeza) o la elasticidad (acompañar ese objeto y recuperar nuestra posición natural) es una cualidad limitada en el tiempo o solo para niños que están aún en fase de crecimiento y de no haberlo trabajado no se vuelve a recuperar al cumplir años y mucho menos si ya tienes 40 de edad o más.
En el Dojo Kaisho pensamos que esta cualidad puede mejorarse a cualquier edad y debe de acompañar al cuerpo durante toda una vida. Esta cualidad no solo se limita a la elevación de piernas, sino también a otras partes del cuerpo y funcionalidades del día a día como hemos explicado más arriba, transfiriéndose a otras partes del cuerpo como el torso en extensión y rotación o a la extensión de los dedos entre otras partes.
El Karate-do que practicamos en el Dojo Kaisho educa con la metodología japonesas y desde las ciencias del deporte esta cualidad. Conocer la amplitud de movimiento, y los propios factores estructurales, (grupos musculares tónicos o fásicos, grado de rigidez y extensión) que cada persona posee, al igual que saber que factores mecánicos deben desarrollarse y cuáles no. Este es uno de los grandes motivos para hacer Karate-do en el Dojo Kaisho, siendo una herramienta donde mejorar la calidad de vida y un seguro añadido en la prevención de lesiones, tanto para personas que quieran comenzar un nuevo capitulo de su vida pasado los 40 años de edad como personas más activas que quieran mejorar sus cualidades o deportes.
Si ha llegado hasta aquí, habrá comprobado las posibilidades que tiene de aprendizaje y mejora nuestra actividad para una persona que tiene 40 años de edad o más, ya que tener una buena forma física tras cumplir años o comenzar Karate-do no es cuestión juventud o vejez, sino de tener actitud, conocimiento y un buen método para llevarlo a cabo.
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Le esperamos en nuestra siguiente publicación.
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